miércoles, 18 de septiembre de 2013

Estrepitoso fracaso.


Grecia ha quedado eliminada del Eurobasket de Eslovenia en la segunda fase. Para un equipo que llegaba al torneo con claras opciones de medalla, no encuentro otro calificativo: fracaso estrepitoso. En uno de los campeonatos más flojos de los últimos años, no llegar a los cruces de cuartos de final supone quedar fuera del Mundobasket 2014 -salvo Wild Card- y quién sabe si tener que jugar fase previa de cara al Eurobasket 2015 de Ucrania. Me da el vértigo sólo de pensarlo. Después especulamos un poco.

¿Por qué hemos llegado a esta situación? ¿Cuáles son las causas del batacazo?

- Pues para encontrar la primera causa habría que remontarse a días antes del campeonato, cuando la Federación no permitió a Nick Calathes incorporarse algunos días después a la concentración. La fecha límite del bail out de la NBA prácticamente coincidía con la del inicio de la concentración. En realidad fue un par de días después, pero es inexplicable que la Federación Nacional de Grecia no tuviera previsto el posible cruce de calendarios. O sea, que no nos vendan lo de Calathes como una renuncia porque no lo fue, ni que nos digan que ha preferido quedarse en Estados Unidos con su mujer -había sido padre hacía muy poco- porque es querer echarle mierda encima. Nick retrasó su llegada porque se estaba jugando el futuro, pero la Federación no lo entendió así. Trincheri, que acababa de llegar, tuvo que tragar, estoy seguro que contra su voluntad.

Debo añadir que las renuncias a ir a la Selección sientan muy mal en Grecia y no suelen entenderse. Aunque Kostas Koufos renunció con tiempo, veremos si vuelve. Esperemos que el caso de Calathes se resuelva. Ha sido lamentable que por culpa de un malentendido no hayamos podido ver al MVP de la Eurocup.

- El Torneo Acrópolis. La preparación fue buena, con amistosos fuera del país y el Torneo Acrópolis en casa, eso sí, demasiado tarde. Se jugó contra equipos potentes que iban a participar en el Eurobasket y Trincheri fue probando cosas. El único pero, probablemente, haya sido el poner el Torneo Acrópolis una semana antes del campeonato. Se ganó a Italia, a Lituania y a Bosnia. ¿Para coger moral? Ya hemos visto que pasó una semana después.

- Problemas físicos y lesiones. No sé hasta qué punto pudieron influir tantos días de preparación o algunos viajes, pero la mala suerte se cebó con los griegos en forma de lesiones.

Antes del Eurobasket Spanoulis se perdió uno de los torneos por problemas en un tobillo, Bourousis lo mismo y Kaimakoglou se golpeó la nariz, teniendo que jugar con máscara unos días. Durante el torneo parecía que a Grecia la había mirado un tuerto: Spanoulis se torció el tobillo malo y se perdió un par de partidos, Mavrokefalidis se torció el suyo el día anterior al partido contra España, forzó y se acabó, Papanikolau también crujió contra Eslovenia y Bramos jugó con molestias el último día.

- El descarte de Kostas Vassileiadis no lo entendí entonces y sigo sin entenderlo ahora: el mejor francotirador de Grecia fuera de los 12 de Trincheri. Aunque no estoy de acuerdo con su descarte, debo respetar la decisión y buscar alguna explicación: Andrea quería jugadores más altos y más fuertes para jugar cerca del aro y defender duro. Entendía que con Bramos, Papanikolau, Spanoulis o Zisis se podía anotar desde fuera sin problemas. Yo eché de menos a Kostas porque ni Bramos ni Papanikolau estuvieron finos desde la periferia.

- Resultados adversos. La mala suerte ha perseguido a los griegos desde el principio también en este aspecto. Cierto que se llegó a las dos últimas jornadas mirando de reojo lo que pasaba en otros partidos, pero si nos fijamos en la primera fase, todo salió al revés. La derrota de Rusia frente a Finlandia tras dos prórrogas cuando tenía el partido ganado, acabó afectando y trastocó el grupo. 

Si hubiéramos dicho antes del campeonato que ganar a Turquía, Rusia y España no servía para entrar en cuartos, nadie lo hubiera creído. En la segunda fase, Grecia confiaba en la victoria de Italia contra Croacia para buscar jugársela con los de Repesa en la última jornada. No hace falta decir que Croacia ganó y llegó con la clasificación en el bolsillo a la última jornada. Aún así, los helenos llegaban con una última posibilidad de pasar si se producía una combinación de resultados. Croacia ganaba a Grecia tras dos prórrogas y mandaba para casa a uno de los favoritos; la derrota de España ante Italia sólo sirvió para hacer más cruel el cataclismo. Claro que después ganó Finlandia a Eslovenia, con lo que los griegos estarían fuera de todas formas. Evidentemente, todo podría haber cambiado si tanto eslovenos como españoles tuvieran la obligación de ganar. O no. 

- Una derrota clave y los “trincherazos”. El partido clave, quién lo hubiera dicho, fue el de Finlandia. Perder contra Koponen y compañía no entraba en los planes. Sin querer buscar excusas, una serie de factores influyeron en la derrota: pesaba la pérdida del partido contra Italia, apenas 16 horas antes; se quemaron muchas energías y algunas decisiones de Trincheri no se entendieron. Spanoulis reapareció contra los finlandeses jugando 33 minutos tras dos partidos en el dique seco por lesión, pero no sirvió. Sin duda, Grecia tuvo el día malo del campeonato en la fecha menos indicada y contra el rival que a la postre los iba a echar. Arrastrar la derrota contra Finlandia a la segunda fase, los mató. 

Contra Italia se jugó muy bien en ataque pero muy mal en defensa, no pudiendo parar en ningún momento a los exteriores. Grecia dominaba bajo los aros con Bourousis y se mantenía la igualdad. Sorprendentemente, Trincheri se olvidó de él en los minutos calientes de la segunda parte y decidió jugar a intercambio de golpes, algo que perjudicó al equipo pese a la inspiración de Perperoglou y Zisis. Lamentablemente, contra Finlandia pasó lo mismo, encajando triples de Koponen desde la frontal como churros. Andrea fue incapaz de cambiar el signo del partido y de plantear alguna defensa alternativa para evitar lanzamientos tan cómodos. No había que pasar los bloqueos por detrás y ahí tanto italianos como finlandeses supieron jugar bien sus cartas. Lo peor de la derrota contra Finlandia, a parte de que iba a pesar como un lastre en el futuro, fue que en toda la segunda parte los griegos no fueron capaces de remontar la diferencia de 10 puntos que cogió el rival. El desacierto, la ansiedad y finalmente la frustración condujeron al descalabro. 

En ambas derrotas Trincheri repitió los mismos errores: rotaciones poco entendibles y muy mala defensa. Desgraciadamente, se perpetuaron los fallos en la segunda fase, encajando muchos puntos contra Eslovenia y Croacia. No encuentro explicación a la salida de Perperoglou del equipo en la segunda fase, a que Bourousis chupase más banquillo que Mavrokefalidis o Kaimakoglou, a la marginación de Fotsis en la primera fase, al olvido de Printezis en los últimos minutos el día de Croacia, etcétera. 

Cuando Andrea decía antes del torneo que Grecia debía ganar desde la defensa, como había hecho siempre, no sé a qué se refería. Llevó jugadores fuertes para defender bien, pero por momentos la zona y la periferia parecían las Ramblas. Muchos centímetros no son sinónimo de controlar el rebote, véase el partido contra Eslovenia, donde los pívots "despejaban" y no capturaban. 

No se explica cómo los verdugos de Grecia en cada partido hayan sido siempre francotiradores: Belinelli, Koponen, Dragic y Bogdanovic, principalmente. No hubo respuesta. 

- A pesar de quedar fuera, hubo notas positivas que conviene resaltar.

- El equipo nunca dejó de pelear. Contra Eslovenia estuvo a un triple de ponerse a tres -lo falló Kaimakoglou- después de ir 26 puntos abajo en el minuto 25, contra España consiguió dar la vuelta y contra Croacia levantó un -7 en la prórroga. Contra Italia el partido estuvo igualado hasta los últimos dos minutos en los que se echó en falta a Spanoulis. El único partido donde no hubo opción fue el de Finlandia. El equipo mostró personalidad y reaccionó cuando estaba casi muerto, pero no fue suficiente. 

- Ganar a España, la bestia negra de los griegos. Enlazando con lo anterior, cabe destacar la victoria ante España, que hacía mantener esperanzas de clasificación. Tras casi una década y muchos cruces en campeonatos oficiales, Grecia rompía el maleficio. Además, se ganó remontando una diferencia de más de 10 puntos, lo que llenó de moral a los jugadores. Desgraciadamente, Eslovenia se encargó también de romper su maleficio con la Selección Griega dos días después.

- Kostas Sloukas y Vasilis Kavvadás. El primero tuvo un papel relevante por la lesión de Spanoulis y cumplió con creces. Kavvadás aprovechó la oportunidad que le brindó Trincheri a pesar de jugar pocos minutos. Debe ser el pívot nacional del futuro.

- ¿Y ahora qué?

Andrea Trincheri debe reunirse con la Federación y decidir si continúa -tiene un año más de contrato- o lo deja rescindiendo el contrato de mutuo acuerdo. El italiano ha pasado de ser un gran entrenador a uno del montón, claro.

La Federación, con Basilakopoulos a la cabeza, tiene que aprovechar su influencia para conseguir una de las 4 Wild Card que se dan para el Mundobasket 2014 de España. Dos parecen adjudicadas a China y Brasil, así que quedarían dos que deberían salir de entre los siguientes países: Grecia, Rusia, Turquía, Nigeria, Alemania, Canadá y veremos si alguno más.

De no conseguir la invitación, habría que ir pensando en el próximo objetivo: la fase de clasificación para el Eurobasket 2015. De ser así, la Selección debería renovar la plantilla y dar paso al resto de jugadores de la generación del 90 que todavía no han tenido oportunidades (Pappas, Jankovic…).

- La polémica.

Tras un varapalo tan gordo la prensa suele remover entre la basura. Han empezado a salir informaciones a posteriori que demostrarían que el ambiente dentro del grupo no era el óptimo. Cualquier declaración, por pequeña que sea, se analiza exageradamente para intentar encontrar algún mensaje escondido. 

- ¿Qué quiso decir Spanoulis después de la derrota con eso de que “hay que hacer limpieza”?

- ¿Por qué Trincheri esquivaba ciertas preguntas o las respondía de manera tan abstracta? Cuando se le preguntó si había elegido libremente a los 12 contestó con la pregunta: “¿conoces a alguna persona que sea 100% libre?”

- ¿Es cierto, como se ha filtrado, que ni Fotsis ni Bourousis eran del agrado de Trincheri? ¿Fue cortado Fotsis y readmitido por presiones de la Federación? ¿Es cierto que cuando Bourousis se enteró de que iba a ser cortado se cabreó como una mona? ¿Por qué jugó Bourousis tan poco si rindió mejor que nadie?

Son demasiadas preguntas sin responder y que tal vez ya no tengan ningún sentido. Nadie duda que Grecia tarde o temprano volverá a estar entre los grandes. Han sido dos fracasos consecutivos que nadie esperaba -no clasificación para Londres y Eurobasket-, pero hay que mirar hacia adelante. El problema es que el Mundobasket es el año que viene y la Selección no está bien. 

- Para terminar, personalicemos:

- Kostas Sloukas: cumplió con creces, dirigiendo y anotando. Le tocó jugar más de lo esperado por la lesión de Spanoulis. Fue de más a menos y en los partidos a cara o cruz flojeó. Sigue atolondrándose cuando le aprietan mucho en defensa.

- Nikos Zisis: para mí ha sido el mejor de la Selección en el torneo. Ha demostrado a lo largo de los días su personalidad, aunque le recordaremos por el fallo de esas dos bandejas contra Croacia. Mantuvo con vida a Grecia en varios partidos. 

- Vasilis Spanoulis: sin duda le ha afectado la lesión en el tobillo. El mejor partido que jugó fue el de España. Demasiadas pérdidas de balón y algo precipitado, no fue el Padrino que todos esperábamos. Por momentos hubo Spanoulis-dependencia: los compañeros lo buscaban exageradamente, pero él no estaba fino.

- Kostas Papanikolau: flojo. Esperaba más del 3 titular del equipo. Aportó intensidad defensiva por momentos, tiro exterior a cuentagotas y poco más. Para colmo, se lesionó contra Eslovenia. Torneo para olvidar.

- Mike Bramos: de menos a más. Tuvo una primera fase muy floja. Estuvo muy desacertado desde el tiro exterior y nunca se sintió cómodo. Fue a partir del partido de España cuando se hizo reconocible. Entró en el campeonato demasiado tarde.

- Stratos Perperoglou: de más a desaparecido. Incomprensiblemente Trincheri apenas contó con él en la segunda fase cuando había sido uno de los mejores de la primera. Estuvo inspirado desde fuera y aportó mucho desde el banquillo. Yo si fuera él estaría muy cabreado.

- Giorgos Printezis: ni fu ni fa. Alternó jugadas de mérito con pérdidas y piedras. Como con Perperoglou, pagó los "trincherazos" de Andrea, combinando la titularidad con excesivos minutos de banquillo. De entrar centrado en el primer cuarto a agitar la toalla.

- Kostas Kaimakoglou: trabajo oscuro. Multiusos hizo de Multiusos. Aportó intensidad defensiva, rebote, dureza e incluso puntos, pero fue de más a menos. Jugó muchos minutos a lo largo del campeonato, donde mezcló acciones de mérito con pérdidas infantiles y errores graves. 

- Antonis Fotsis: de inaudito a básico. Fotsis no contaba para Trincheri y por eso casi no jugó durante la primera fase. La baja de Mavrokefalidis hizo que Antonis tuviera que entrar en el Eurobasket en la segunda fase. Que me perdone el ex madridista, pero no estaba para jugar. Físicamente no aguantaba el ritmo y corría por el campo completamente perdido. Ni siquiera se miraba el aro. 

- Vasilis Kavvadás: jugó poco pero francamente bien. El anti Gasol se desgastó el día de España aunque perdió el duelo, como era de esperar. Cumplió con su papel específico, que era el de defender a hombres altos y coger rebotes. Tarea de intimidación, aunque está muy verde todavía. 

- Loukas Mavrokefalidis: bien pero blando. El problema de Mavro es que siendo el más alto de la cancha, no jugaba de pívot. Su tendencia a salir a tirar de cuatro metros debería haber sido corregida y no lo hizo. Aportó cosas en ambas zonas, pero siempre dio la sensación de no dar el máximo. No pudo ayudar en la segunda fase porque se lesionó y tuvo que regresar a Atenas.

- Ioannis Bourousis: el mejor interior y uno de los mejores del equipo. Leyó bien los partidos y entendió que era superior debajo del aro. Sin embargo, Andrea lo castigó con demasiados minutos sentado. El pívot acabó descentrado por este motivo en algunos partidos, pero en general lo hizo muy bien.

- Andrea Trincheri: dudas. Las extrañas rotaciones acabaron afectando al equipo, que de repente se encontraba jugando sin 5 o con dos 5, para sorpresa de todos. Sentar a jugadores que están jugando muy bien o poner a otros que llevan dos cuartos sentados no es normal. No dio con la tecla en los partidos claves y las remontadas contra Eslovenia, España y Croacia fueron más bien fruto de la rabia y la pasión que le pusieron los jugadores, que a las instrucciones del entrenador. No supo reconducir las cosas cuando los partidos se torcieron y estuvo torpe en la lectura de situaciones. 

Terminó el torneo y todavía no sabemos exactamente a qué quería jugar Andrea. Por desgracia, creo que los jugadores tampoco. 

miércoles, 11 de septiembre de 2013

Kostas Kaimakoglou (K3): el multiusos de la selección griega.



Antes de que se pusiera de moda en la NBA llamar al jugador con iniciales y cifras (CP3, por ejemplo) Andrés Montes nos enseñó a definir a los jugadores en una sola palabra. Por la manera de jugar o por alguna característica física el periodista encontraba el mote exacto para cada uno. Probablemente -dejando al margen la cantidad de nombres que puso a “jugones” de la NBA- sean los de jugadores de la Selección Española los más recordados y que todavía se mantienen. Así, Pau Gasol era E.T., José Calderón Mr. Catering, Felipe Reyes Espartaco y un largo etcétera que usan ahora los periodistas con total naturalidad.

Uno de los motes más llamativos era el de Jorge Garbajosa: Multiusos. Multiusos porque te sirve tanto para un roto como para un descosido: el hombre que sirve para cualquier trabajo. Si hay que abrir desde fuera una zona, llamamos a Multiusos, si hay que “secar” a la figura rival, sacamos a Multiusos, si hay que forzar dentro de la pintura, metemos a Multiusos, si hay que dar un garrotazo bien dado, allí está el brazo de Multiusos, etcétera.


Kostas Kaimakoglou es el Multiusos griego. Sirve tanto para desatascar tuberías como para tapar un agujero con masilla o poner una bombilla. Es el jugador que todos los entrenadores querrían tener: disciplinado, serio, trabajador, valiente, fuerte, intenso, duro, pero sobretodo, ÚTIL. No es el más guapo ni el que más camisetas vende; tampoco el que más anota y ni siquiera el que más juega, pero es el que de los que más rinde. No exige más minutos de juego ni se queja, pero siempre está ahí para echar una mano.

Intenso en su juego, suple sus limitadas cualidades ofensivas con un par de pelotas -con perdón-. Un albañil al servicio del grupo. No es ni un leñero ni un tronco, pero si hay que pegar no se corta un pelo.

K3 es un jugador polivalente que suele jugar de 4. Puede hacer muchas cosas distintas. Con sus 2,05 centímetros es capaz de anotar triples, rebotear, defender y jugar de espaldas en el poste bajo. Si hay que morder, lo hace. Además, suele ser el jugador que se tira al parqué en esas bolas que no tienen dueño. 

A veces es más difícil superar a K3 que subir el K2. Es fuerte y cuando se le da la orden de parar a alguien, no perdona. En ataque prefiere recibir de espaldas en el poste bajo e ir hacia el aro. A veces se lía a botar y baja demasiado la bola, pero sabe protegerse con el brazo contrario. No le hace ascos a jugar de cara contra pívots más altos pero más lentos, yendo hacia barraca tras un cambio de mano. No le importa chocar, porque es una roca, aunque a veces “se empotra contra el muro”. Su jugada favorita es la de botar protegiendo encorvado el balón desde una esquina hacia el centro para girarse y lanzar en suspensión hacia atrás. En defensa puede emparejarse con rivales más altos sin problemas y si Grecia planta una zona, coge rebotes. El Multiusos griego también es capaz de correr o de subir la bola, porque no es torpe como otros. Tiene visión de juego y distribuye desde el poste alto además de ofrecerse y bloquear a todo bicho viviente.


Multiusos Garbajosa se ganó el respeto de todos con su actitud, incluidos árbitros, rivales y compañeros. Serán pocos -o ninguno- los que hablen mal de K3, ya os lo digo yo. Quizás lo que le falte a Kostas sea “la mirada” y el porte de Jorge: una mirada o un gesto de reprobación y todo el mundo a callar. Javier Imbroda habló de Garbajosa como “el poder en la sombra”. Éste no sería el caso de nuestro protagonista al que le falta ganar alguna condecoración más para subir de cabo a teniente. Otros se llevan la foto y el mérito de las victorias, pero no le importa: disfruta como el que más en segundo plano. Garbajosa era uno de los actores principales mientras que K3 es un secundario de lujo.


No tiene el peso específico de otros jugadores como Diamantidis, Bouroussis o Zisis, pero todo se andará. Se ha ganado el respeto de todos con su trabajo y su humildad. Además, si nos fijamos bien, su carrera hasta ahora no está nada mal. K3 ha formado parte de la Selección de Grecia desde categorías inferiores, ganando el Eurobasket junior en 2002. Lleva jugando junto a Bouroussis, Zisis, Spanoulis y compañía desde hace más de 10 años, aunque no se hizo conocido para la mayoría de nosotros hasta que fichó por el Panathinaikós de Obradovic. Anteriormente había debutado en la liga con el Near East hasta que fichó por el Maroussi en 2004. Multiusos Kaimakoglou fue una de las piezas claves de aquel equipo de barrio que se plantó en los cruces de la Euroliga estando en la quiebra. Con el PAO ganó una liga, una copa y una Euroliga en solo dos temporadas. Recuerdo como si fuera ayer aquella defensa zonal que mandó Obradovic en el Palau con K3 arriba que volvió locos a los culés. El tipo saliendo hasta los siete metros para presionar a Marcelinho Huertas con los brazos abiertos y éste absolutamente sorprendido. La crisis y los petrodólares convencieron a Kostas para marcharse al Unics Kazán ruso, donde le hemos perdido un poco la pista. Ha sido un fijo de la selección senior los últimos campeonatos, consiguiendo la medalla de bronce en el Eurobasket de 2009.


Ο Κώστας Καιμακόγλου: Tο Πολυεργαλείο της Εθνικής Ελλάδας.

Πριν να είναι γίνει της μόδας στο ΝΒΑ να ονομάζουν με αρχικά και νούμερα τους παίκτες (για παράδειγμα CP3) ο Andrés Montes μας έμαθε να ορίζουμε τους παίκτες με μόνο μία λέξη. Λόγω του τρόπου που έπαιζαν ή λόγω κάποιου φυσικού χαρακτηριστικού ο δημοσιογράφος έβρισκε το σωστό παρατσούκλι για τον καθένα. Έτσι, ο Pau Gasol ήταν ο Ε.Τ., ο José Calderón o Mr. Catering, o Felipe Reyes o Espartaco κτλ. που χρησιμοποιούνται ακόμα και σήμερα οι δημοσιογράφοι με απόλυτη φυσικότητα. 

Ένα από τα πιο φανταχτερά παρατσούκλια ήταν αυτό του Jorge Garbajosa: Το Πολυεργαλείο. Πολυεργαλείο, επειδή χρησιμεύει για όλες τις δουλειές. Αν πρέπει να ανοίξει η άμυνα από έξω , φωνάζουμε Το Πολυεργαλείο, αν πρέπει να εξουδετερώσουμε τον καλύτερο παίκτη της αντίπαλης ομάδας, βγάζουμε Το Πολυεργαλείο, αν πρέπει να πιέσουμε μέσα στη ρακέτα, βγάζουμε Το Πολυεργαλείο, αν πρέπει να χτυπήσουμε, εκεί βρήσκεται είνα το μπράτσο του πολυεργαλείου, κτλ…


Ο Κώστας Καιμακόγλου είναι ο Έλληνας Πολυεργαλείο. Χρησιμεύει τόσο για να ξεμπλοκάρει σωλήνες όσο για να καλύψει μία τρίπα με στόκο η να βάλει μία λάμπα. Είναι ο παίκτης που όλοι οι προπονητές θα ήθελαν να έχουν: πειθαρχημένος, σοβαρός, εργατικός, γενναίος, δυνατός, σκληρός, άλλα κυρίως, ΧΡΉΣΙΜΟΣ. Δεν είναι ούτε ο πιο όμορφος, ούτε αυτός που πουλάει περισσότερες φανέλες, ούτε αυτός που βάζει τα περισσότερα καλάθια, αλλά έιναι από αυτούς που αποδίδουν περισσότερο. Δεν ζητάει περισσότερο χρόνο συμμετοχής και ούτε διαμαρτύρεται, αλλά πάντα είναι εκεί για να βάλει ένα χεράκι.  

Με ένταση στο παιχνίδι του, αναπληρώνει τις δικές του επιθετικές δυνατότητες με δύο καρύδια -με το συμπάθειο-. Ένας εργάτης στην ύπηρεσία της ομάδας. Δεν είναι «ξυλοκόπος», αλλά αν πρέπει να χτυπήσει δεν διστάζει.

Ο Κ3 είναι ένας παίκτης πολυχρηστικός που συνεχώς παίζαει ως τεσσάρι. Μπορεί να κάνει πολλά διαφορετικά πράγματτα. Με τα 2,05 του είνα ικανός να βάλει τρίποντα, να πάρει ριμπάουντς, να παίξει άμυνα και να παίξει με πλάτη στο low post. Αν πρέπει να δαγκώσει, το κάνει. Επίσης, συνεχώς είναι ο παίκτης που ρίχνεται στο παρκέ σ’εκείνες τις μπαλιές που όλοι διεκδικόυν.


Μερικές φορές είναι πιο δύσκολο να ξεπεράσεις τον Κ3 από να ανέβεις το Κ2. Είναι δυνατός και όταν του δίνουν την εντολή να σταματήσει κάποιον, δεν συγχωρεί. Στην επίθεση, προτιμάει να πάρει τη μπάλα με τη πλάτη σε low post και να πάει προς το καλάθι. Μερικές φορές, «χάνεται» κρατώντας τη μπάλα πολλή ώρα στα χέρια του και μάλιστα σκυμμένος, αλλά ξέρει να προστατεύεται με το άλλο μπράτσο. Δεν έχει πρόβλημα να παίξει πρόσωπο με πρόσωπο απέναντι σε πιο ψηλά αλλά και πιο αργά τεσσάρια ή πεντάρια, διεισδύοντας μέτα από αλλαγή χεριού. Δεν τον πειράζει να συγκρούεται με άλλους παίκτες, γιατί έιναι ένας «βράχος», αν και μερικές φορές χάνει τον έλεγχο. Η αγαπημένη του κίνηση είναι να μετακινείται με τη μπάλα από μία γωνία προς το κέντρο για να γυρίσει και να σουτάρει προς τα πίσω. Στην άμυνα μπορεί να μαρκάρει πιο ψηλούς αντιπάλους χωρίς προβλήματα και αν η Ελλάδα επιλέξει άμυνα ζώνης, παίρνει ριμπάουντς. Ο Έλληνας "Πολυεργαλείο"  είναι επίσης ικανός να τρέξει ή να ανεβάσει τη μπάλα γιατί δεν είναι αδέξιος, όπως άλλοι. Έχει καλή αντίληψη του παιχνιδιού και μοιράζει μπαλιές από το high post και κάνει μπλοκ σε ό,τι κινείται.


Ο Multiusos Garbajosa κέρδισε το σεβασμό όλων με τη δική του στάση, συμπεριλαμβανομένων διαιτητών, αντιπάλων και συμπαικτών. Πρέπει να είναι λίγοι -ή κανένας- αυτοί που μιλάνε άσχημα για τον Κ3, σας το διαβεβαιώνω. Ίσως αυτό που λείπει από τον Κ3 να είναι το «βλέμμα» και το «παράστημα» του Jorge: ένα βλέμα ή μία κίνηση αποδοκιμασίας και όλοι  σωπαίνουν Ο Javier Imbroda έλεγε για τον Garbajosa ότι ήταν «ο αφανής ήρωας». Δεν συμβαίνει το ίδιο με τον δικό μας πρωταγωνιστή, από τον οποίο λείπει κάποιο ακόμη παράσημο για να ανέβει κατηγορία. Άλλοι βγαίνουν στις φωτογραφίες και παίρνουν τον έπαινο για τις νίκες, άλλα δεν τον πειράζει: χαίρεται όπως οι άλλοι στο παρασκήνιο. Ο Garbajosa ήταν ένας από τους πρωταγωνιστές και ο Κ3 έιναι ένας από τους δευτεραγωνιστές.

Δεν έχει το ειδικό «βάρος» που έχουν παίκτες σαν τον Διαμαντίδη, τον Μπουρούση ή τον Ζήση, αλλά όλα θα γίνουν με τον καιρό. Έχει κερδίσει τον σεβασμό όλων με τη δουλειά του και με την ταπεινότητα του. Επίσης, αν προσέξουμε καλά, η καριέρα του μέχρι τώρα έινα αρκετά καλή.

Ο Κ3 είναι μέλος της Εθνικής από τις μικρές ομάδες, έχοντας κερδίσει το Eurobasket εφήβων του 2002. Παίζει μαζί με τον Μπουρούση, τον Ζήση, τον Σπανούλη και τα υπόλοιπα παιδιά πάνω από δέκα χρόνια, αν και έγινε γνωστός στους περισσότερους όταν υπέγραψε με τον Παναθηναικό του Obradovic. Πριν, είχε κάνει το ντεμπούτο του στο πρωτάθλημα με την Νήαρ Ήστ μέχρι που πήγε στο Μαρούσι το 2004. Το Πολυεργαλείο Καιμακόγλου ήταν ένας από τους παίκτες-κλειδία εκεινής της συνοικιακής χρεωκοπημένης ομάδας που βγήκε στα χιαστί παιχνίδια της Euroleague

Μαζί με τον ΠΑΟ κέρδισε ένα πρωτάθλημα, ένα κύπελλο Ελλάδας και μία Euroleague σε δύο μόνο σεζόν. Θυμάμαι σαν να ήταν χθες εκείνη την άμυνα ζώνης που ζήτησε ο Obradovic στο Palau με τον Κ3 μπροστά που ξετρέλανε τους culés. Το παλικάρι εβγάινε μέχρι τα 7 μέτρα για να πιέσει τον Marcelinho Huertas με τα χέρια ανοιχτά και εκείνος είχε μείνει έκπληκτος. 

Η κρίση και τα πετροδολάρια έπεισαν τον Κώστα να φύγει στο Ούνικς της Ρωσίας, για αυτό και δεν το βλέπουμε συχνά. Είναι μόνιμος παίκτης της Εθνικής στα τελευταία τουρνουά, κερδίζοντας το αργυρό μετάλλιο στο Eurobasket του 2009.

lunes, 2 de septiembre de 2013

Doce tipos duros.

 
Kostas Kaimakoglou herido durante unas maniobras militares.

Trincheri ha elegido para este Eurobasket 2013 a 12 tipos duros: son Los violentos de Andrea. El italiano parece que lo tiene claro: Grecia ha sido grande cuando se ha dedicado defender. Así que, olvidémonos del USA-Grecia de Saitama y de la Grecia de Zouros a la carrera. Con esto no quiero decir que los helenos no puedan meter más de 100 puntos en algún partido, pero contra los equipos gordos van a jugar “a rascar”. 

Vassilis Spanoulis.
 
No temáis, Spanoulis ya se ha dejado crecer la barba.

Kill Bill por su catana afilada y el Padrino por ser el p. amo. Ha mejorado con los años. En él se funden la inteligencia de Papaloukás y el carisma de Diamantidis. En Vassilis, confianza ciega de absolutamente todos. Sus opiniones se respetan tanto o más que las del seleccionador. Es la prolongación de Trincheri en la pista. El objetivo del Capitán General es el oro y el MVP, aunque esté obligado a decir lo de siempre, que “hay que ir partido a partido”. No hay en Europa jugador más ambicioso que él.

Copyright 1: triple tras bloqueo directo de un hombre alto desde la frontal.
Copyright 2: penetración que acaba en bandeja con cambio de mano en el aire.

Nikos Zisis.
 
Nikos Zisis, la seguridad de un elegante trotamundos.

El yerno perfecto. Un secundario de lujo que parece que no esté pero siempre cumple. Uno de los oficiales del Padrino, curtido en mil batallas. El Coronel aportará lanzamiento exterior y serenidad en momentos complicados. Deberá usar su fusil más de lo normal para abrir defensas zonales porque faltan tiradores.

Copyright: triple desde tres cuartos tras bloqueo indirecto o incluso tras bote. 

Kostas Sloukas.
 
El Gran Jefe con el soldado de primera Kostas Sloukas.

Yogur griego de nueva generación. Para momentos puntuales puede ser muy útil. Activo en defensa a veces se precipita en ataque. Veremos si entiende que el juego de Grecia, si quiere optar a algo, debe ser más defensivo que ofensivo. Por un lado, puede revolucionar el partido si las cosas van mal, pero por otro puede desestabilizar el orden defensivo griego. Una oportunidad para seguir creciendo y madurar. Soldado de primera.

Copyright 1: el lanzamiento frontal en suspensión desde 6 metros tras bote. 
Copyright 2: el tiro marca de la casa desde más de medio campo -o desde el triple- al final de la posesión después de dar dos pasos.

Mike Bramos.
 
Mike Bramos, un auténtico marine.

Salvad al soldado Bramos. Un legionario sin tatuajes. Duro, serio y trabajador. Perfectamente adaptado y ya convertido en una de las piezas clave de Grecia. Espíritu defensivo con posibilidad de correr. Físico poderoso. Capaz de enlazar series de triples escandalosas. Cabo Mayor que quiere presentar sus credenciales en el campeonato para subir a Suboficial.

Copyright: esos triples desde las esquinas y esas extensiones culminando contraataques. 

Kostas Papanikolau.
 
Kostas Papanikolau, máximo exponente del espíritu heleno.

Un tres jugando de tres. Para mí, la pieza clave porque juega en la posición clave, la posición “Pete”. Un jugador hecho. Capacidad atlética y buen lanzador. Riqueza de movimientos y cualidades físicas que le permiten ayudar bajo los dos aros. Sargento Primero. De los pocos que canta el himno. Pasional.

Kostas Kaimakoglou.
 
El guerrero Kostas Kaimakoglou.

El hombre de la máscara de hierro. Más madera. Roca para defender a treses e incluso cuatros. No se acobarda. Pelea cuerpo a cuerpo sin importarle su inferioridad física. Perro de presa. Capaz de anular a estrellas rivales y muy útil en defensas zonales. Rebotea muy bien. Limitado en ataque. Por el trabajo oscuro que realiza y su posición en el campo, es Tsartsaris II. Cabo.

Copyright: su lanzamiento frontal desde cuatro metros echándose hacia atrás tras bote bajo y reverso.

Stratos Perperoglou.
 
Stratos Perperoglou, la elegancia es un grado.

Seriedad al servicio de su majestad. Otro fiel escudero del Padrino. Un tres inteligente. Capaz de anotar con relativa facilidad, bien tirando, bien jugando de espaldas. Sargento.

Giorgos Printezis.
 
Giorgos Printezis, otro soldado que juega duro.

Bailando con lobos. Mueve bien los pies en la pintura y hace saltar a los pívot rivales. A veces mueve el pie de pivote por querer ir demasiado rápido. Otro soldado con dentadura que utiliza los codos. Debe insistir en jugar debajo y olvidarse de esos lanzamientos triples que a veces son auténticas mandarinas. Crece con Spanoulis en pista. Brigada.

Copyright: su ganchito con la zurda o con la derecha desde el poste bajo (que se lo digan al CSKA). A veces suelta la bola sin tener el brazo totalmente extendido cosa que sorprende al defensor. 

Antonis Fotsis.
 
El Teniente Coronel Antonis Fotsis rapado al cepillo y afeitado

Fiabilidad al servicio del grupo. Un cuatro incómodo que juega por fuera. Ha entendido que su labor defensiva es más importante que la ofensiva. No anota tanto, pero rebotea mejor. Teniente Coronel que ha estado en muchas guerras. Varias medallas cuelgan de su casaca.

Copyright: sus triples desde las esquinas o desde posiciones alejadas del aro suelen hacer daño. 

Loukas Mavrokefalidis.
 
Loukas Mavrokefalidis ha vuelto para quedarse.

El retorno del Jedi. Debe dar un paso adelante y convertirse en la referencia ofensiva interior del equipo blanquiazul. Su aportación se me antoja decisiva porque no sabemos si va a aguantar Bouroussis todo el campeonato a tope. Cabo.

Giannis Bouroussis.
Giannis Bouroussis, el techo griego, percutiendo en la zona.

Un techo de Uralita. El cinco titular desde hace ya unos años. Peso específico dentro del grupo y larga experiencia. Debe explotar más sus recursos. No lo he visto con la confianza de otras veces porque tiene un problema en el tobillo izquierdo. Techo con alguna grieta. Fundamental la regulación de minutos. No es el de hace unos años, pero tiene el grado de oficial, claro. Comandante condecorado.

Copyright: su minigancho cercano tras movimiento de pies suele ser bastante efectivo.

Vassilis Kavvadás.
 
Vassilis Kavvadás, fuerza y músculo para proteger al líder.

El guardaespaldas. El rookie que llega por sorpresa para defender a hombres pesados. Chocar contra él es hacerlo contra un muro. La continuación de los bloqueos hacia el aro es lo que mejor hace. Defiende duro y puede taponar o rebotear. La inexperiencia es su máximo hándicap y debe vigilar con los bloqueos en movimiento sobre Spanoulis. Soldado raso.

Parte de (pre)guerra: (curioso que antes de la guerra ya tengamos un parte de bajas y de heridos).


- Heridos: Giannis Bouroussis arrastra problemas físicos que le han impedido jugar algún partido de preparación. Si fuerza demasiado, corre el riesgo de romperse. Kostas Kaimakoglou recibió un golpe en la nariz en un amistoso que le ha hecho llevar máscara. No es óbice para que se parta la cara durante el campeonato, el descerebrado.

- Desertores: por diversos motivos, Nick Calathes (bail out y problemas de logística), Kostas Koufos (renuncia para descansar) y Sofoklís Schortsanitis (alegó problemas físicos) han sido declarados desertores.

- Jubilados: Kostas Tsartsaris (forzosa, retirado), Papaloukás (forzosa, retirado) y Dimitris Diamantidis (auto pensionista desde 2010).

- Bajas en combate: Nikos Pappas, Vlado Jankovic, Dimitris Katsivelis, Kostas Vassileiadis y Ian Vougioukas fueron sacrificados por el Gran Jefe.

Mis notas:

- El objetivo de Grecia es la medalla, no el oro.

- No entrar en semifinales sería un fracaso.

- A las semis deberían llegar España, Grecia, Francia y Lituania. Luego hay un segundo grupo de equipos que están un escalón por debajo: Turquía, Eslovenia, Serbia, Rusia, FYROM y Croacia.

- Grecia tuvo muchos problemas con el lanzamiento exterior en el Preolímpico de Venezuela y Trincheri se ha cargado al francotirador del equipo. Como sigan los problemas ahí, lloverán las críticas.

- No sirve lamentarse por los que no están o no han querido estar. Las bajas de las otras selecciones son más sensibles que las griegas a pesar de no contar con ningún jugador NBA.

- Los Spanoulis, Bramos, Perperoglou, Kaimakoglou, Printezis o Kavvadás aseguran partidos duros y físicos. Pelearán seguro.

- ¿Es casualidad que se haya optado por Kaimakoglou, Printezis, Papanikolau, Perperoglou o Bramos, que son jugadores 3-4 fuertes? Evidentemente, no. Ahí puede estar la llave que abra las defensas. Que Dimitris Papanikolau, aquel jugador durísimo que alternaba las posiciones de 3 y de 4 sea el segundo de Trincheri, dice mucho.


Dimitris Papanikolau, el instructor del regimiento. 

- Quizás no veamos partidos atractivos de Grecia, pero seguro que tácticamente merecen la pena.