Mostrando entradas con la etiqueta Roy Tarpley. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Roy Tarpley. Mostrar todas las entradas

jueves, 20 de agosto de 2015

Jugadores que han vestido varias camisetas de equipos de Salónica (y II).


Otro tesalonicense “de adopción” podría ser Walter Berry, que llegó al Aris procedente del Atlético de Madrid en la temporada 1991-1992. A los 10 partidos se hartó de los retrasos en los pagos y se marchó al Nápoles, donde ya había jugado dos años antes. De ahí pasó al Olympiacós y después al PAOK de Salónica (temporada 93-94), con el que ganó la Korac. La temporada siguiente firmó por el Iraklís, desde donde se marchó otra vez el Olympiacós. Por segunda vez firmó por el Aris (temporada 96-97) y por el PAOK (temporada 98-99), con un año de excedencia en el Politi Cantú. Todavía en el año 2000 tuvo tiempo de jugar 2 partidos en el Makedonikós, un equipo-burbuja de Salónica de la época. Él y Katsoulis son los únicos que jugaron en los 4 equipos de la división de honor de Salónica.

Roy Tarpley jugó en el  Aris (temporada 1992-1993), por el que había fichado procedente de los Miami Tropics de la USBL tras su expulsión de la NBA. El Iraklís de la temporada 1995-1996 lo repescó de nuevo tras ser cazado otra vez en un control cuando estaba en Dallas Mavericks. En 1998 jugó otra vez con el Aris, aunque muy pocos partidos. Otro americano que, como Mike Jones, estuvo poco en el norte pero se le recuerda con emoción.

Nasos Galakterós jugó cuatro años en el AEK de Atenas antes dar el salto al PAOK, donde estuvo 2 temporadas y ganó una Copa Korac y una Copa de Grecia (1993-1995). Después jugó en el Olympiacós, con el que logró el triplete antes de fichar por el Aris. Vistió de amarillo entre  1997 y 1999 y ganó otra Copa. Galakterós ganó títulos con varios equipos distintos, pero nunca llegó a ser el jugador que prometía en sus inicios.

Con la Selección participó en dos mundiales (1990 y 1994) y en un Eurobasket (1993).

La carrera de Panagiotis Liadelis siempre irá unida al Aris de Salónica, donde jugó 7 temporadas (1993-2000). El escolta se convirtió en uno de los líderes del equipo en la época post Galis-Giannakis. Ganó la Copa Korac de 1997 en Bursa y la Copa de Grecia de 1998, siendo MVP de la final.

Liadelis con el PAOK.

Sorprendentemente, decidió fichar por el PAOK, donde estuvo un año y medio aproximdamente entre 2000 y 2002. En la temporada 2002-2003 regresó a Grecia tras unos meses en Rusia para jugar en el Makedonikós. Sin embargo, aceptó una oferta del Valencia a media temporada y allí se fue. Entre 2006 y 2009 recuperó su nivel en Ucrania, donde ganó 3 ligas y 2 Copas con el Mariopol.

Georgios Maslarinos fue otro escolta de 1,93 nacido en Suecia que jugó en los dos equipos fuertes de Salónica. En el Aris sólo estuvo en la temporada 93-94, mientras que en el PAOK se mantuvo tres años (1997-2000). Con los bicéfalos ganó una Copa. Hizo carrera en Grecia y llegó a ganar la Copa Saporta con el Marousi y la liga con el Panathinaikós.

Giannis Gianoulis, nacido en Toronto, jugó en el PAOK (1994-2001), procedente del Expresso Kalithea. Pocos recuerdan que Gianoulis llegó a jugar en el Aris una temporada (2006-2007) después de pasar varias temporadas fuera del país.

Fue internacional entre 1994 y 2004.

Giorgos Sigalas, figura mítica del Olympiacós de los 90, jugó en el PAOK, en el Makedonikós y en el Aris, aunque fuera de Grecia pocos lo recuerdan. Con el Aris jugó 2 temporadas (1998-2000), con el PAOK otras 2 (2000-2002) y con el Makedonikós una (2003-2004). Tras un año en el Panionios, Rambo regresó al Aris de Salónica, donde se mantuvo 2 temporadas entre 2005-2007 y se retiró.

Sigalas también vistió de negro.

6 Eurobaskets contemplan a Sigalas, además de 2 mundiales y unos Juegos Olímpicos (Atlanta 1996). Sus máximos logros los consiguió con la camiseta del Olympiacós, que defendió desde inicios de los 80 hasta 1997.

A Nikos Chatzivrettas todos lo recordamos con el PAO o con el CSKA, cuando la mayor parte de su carrera la ha pasado en Salónica, su ciudad natal. En el Evosmos estuvo desde 1990 hasta 1997, año en el que firmó por el Iraklís, equipo con el que despuntó (1997-2002). Su larga carrera terminó en el Aris (2009-2012).

Chatzivrettas con el Aris.

Casi todos sus títulos son con el PAO: 6 ligas, 5 Copas y 2 Euroligas (2 tripletes). Además, ha conquistado una liga rusa y ha ganado el oro con la Selección en el Eurobasket de 2005 y la plata del Mundobasket de 2006. Con el Iraklís fue el máximo anotador de la liga en 2002. Nikos es el tesalonicense más laureado.

Otro jugador nacido en Salónica que ha hecho carrera en el baloncesto ha sido Kostas Charalampidis. Inició su andadura en el Makedonikós de la buena época, con el que logró dos ascensos y donde jugó entre 1997 y 2002 (fue MVP de la A2 ese último año).

Tras dos años en el Olympia de Lárissa regresó al Makedonikós, donde se mantuvo dos temporadas más (2004-2006). Jugó la final de la ULEB Cup.

En la temporada 2010-2011 jugó en el Aris de Salónica y desde 2012 viste los colores del PAOK.

Entrenadores.

A parte de Vangelis Alexandris y Slobodan Subotic, algunos de los entrenadores que trabajaron en más de un equipo de la ciudad fueron Dragan Sakota, Dusan Ivkovic y Soulis Markopoulos.

Dragan Sakota procedía de la Cibona cuando llegó al PAOK en la temporada 1990-1991. Conquistó la Recopa de Europa. Hizo una buena campaña en el Iraklís (1993-1994), procedente del Apollon Patras. De ahí volvió al PAOK, donde estuvo la temporada 1994-1995. Tras entrenar al Peristeri, regresó al Iraklís (1990-2000), y una temporada después entrenó al Aris (2000-2001). A Sakota se le recuerda en el PAOK por el triunfo de la Recopa contra el CAI Zaragoza y en el AEK por la liga de 2002. Sigue en activo. Regresó al AEK en 2014.

Procedente del Partizán de Belgrado, Dusan Ivkovic estuvo dos temporadas en el Aris, entre 1980 y 1982. Años después regresó a Salónica para entrenar al PAOK entre 1991 y 1994 (procedente del Volvodina). Con los bicéfalos ganó la liga 91-92 y los condujo a la Final Four. Salónica le sirvió a Duda de trampolín para dar al salto a la zona sur. Dirigiría al Olympiacós en dos etapas exitosas, al AEK y al Panionios.

Markópoulos con la Copa Korac de 1994.

Soulis Markopoulos es tesalonicense y ha entrenado al PAOK en tres épocas distintas. Lo hizo en la temporada 93-94 ganando la Copa Korac, la 2005-2006 y desde la 2009 hasta la actualidad. También entrenó al Iraklís entre 1987 y 1990, y al Aris entre 1994 y 1996. Una institución en Grecia que sigue en activo superando récords. Su hijo Charis ya entrena en primera.

La década del 2000.

En la década que va del 2000 al 2010 han sido muchísimos los casos de jugadores que han vestido varias camisetas. Ya no se identifica al jugador con el club.

Tenemos casos de jugadores poco destacados aunque útiles para la segunda unidad.

Nikos Betoulas, por ejemplo, jugó tanto en el PAOK (99-00) como en el Aris (2003-2004) aunque pasó sin pena ni gloria por ambos.

El alero de color Nestoras Kommatos, un auténtico trotamundos del baloncesto, jugó en el PAOK dos temporadas entre 2001 y 2003 antes de fichar por el Aris, donde sólo estuvo una (2003-2004). En el club amarillo fue el máximo anotador de la liga, MVP del All Star y MVP de la Copa que el Aris conquistó. Los equipos de Salónica pasaron a ser equipos-trampolín. Kommatos fichó la temporada siguiente por el Maccabi de Tel Aviv, con el que ganó la Euroliga.

Spiros Panteliadis jugó un año en el PAOK (2003-2004) y luego dos años en el Aris (2006-2008). Venía de ganar una liga y una Copa con el AEK, pero no hizo nada destacado. Como dato curioso, llegó a jugar unos partidos con el Huelva.

El “loco” de Giannis Gagaloudis, director de juego que llegó a ser internacional, jugó en el Aris entre 2001 y 2003, con el que ganó la Eurochallenge. En 2004 firmó por el PAOK, donde se mantuvo 2 temporadas.

Al pívot Lázaros Agardakos lo llegué a ver en el Aris, donde jugó entre 2007 y 2009. En la temporada 2006-2007 había formado parte de la plantilla del PAOK. Jugador de rooster y poco más.

Dimitris Verginis fue considerado uno de los mayores talentos de la década nacidos en Salónica. Dio sus primeros pasos en el equipo de Panorama y luego en el Anatolia hasta que se lo llevó el PAOK, donde jugó entre 2005 y 2008. Fue fichado por el Panathinaikós, donde estuvo 2 años chupando banquillo y sin progresar. Entre 2010 y 2013 volvió a Salónica para vestir la camiseta del Aris. Verginis se quedó en “eterno proyecto”. Eso sí, el triplete conseguido con el PAO en 2009 no se lo quita nadie.

Otro jugador que prometía y al final se quedó a medio camino fue Alexis Kiritsis, que vistió la camiseta del Aris en sus inicios (2003-2005) y luego la del PAOK (2008-2009).


La vida deportiva de Lázaros Papadópoulos va muy unida a la ciudad de Salónica. Despuntó en el Iraklís desde muy joven, donde jugó entre 1996 y 2001. Tras dos años en el Panathinaikós, regresó al Iraklís para jugar una temporada más (2003-2004). Entre 2009 y 2011 vistió la camiseta del PAOK, y también en la temporada 2012-2013.

Papadópoulos ha sido el pívot de la generación de Diamantidis y Papaloukás. Oro en el Eurobasket 2005 y plata en Pekín 2006 con la Selección, ha ganado la Euroliga y la liga nacional tanto con el Olympiacós como en el PAO. También tiene una Copa con los verdes y una ULEB Cup con el Dynamo de Moscú. Vive en Salónica y tiene montada una especie de escuela de baloncesto junto a otros colegas.

Sofoklís Schortsanitis inició su carrera profesional en el Iraklís, donde jugó tres temporadas (2000-2003). De allí se fue a Cantú para regresar una temporada después a Salónica, donde jugó un año en el Aris. Tras una temporada de altos y bajos constantes fichó por el Olympiacós.

Savas Iliadis es otro de la quinta de Diamantidis-Chatzivrettas-Papadópoulos que dio sus primeros pasos en el Evosmos de Salónica. Entre 2002 y 2005 jugó en el Iraklís aunque siempre dijo ser seguidor del Aris. Los amarillos se hicieron con sus servicios y allí jugó entre 2006 y 2009. Todavía en 2011 regresó a la ciudad para disputar unos partidos con el Iraklís.

El center Giorgos Bogris pasó un año por el Aris (2001-2012) y otro por el PAOK (2013-2013). Con los segundos realizó una gran campaña y fue elegido jugador de mayor progresión.

Christos Tapoutos, ala-pívot de 2,03 que logró ganar la liga 2002 con el AEK, fue otra de tantas eternas promesas. Ha jugado en múltiples equipos, entre los cuales no podían faltar el Iraklís (2004-2005), el PAOK (2009-2010) y el Aris (2010-2012).

Tapoutos formaba parte de la Selección Junior campeona del Eurobasket 2002

Michalis Tsairelis, actualmente en el Olympiacós, es tesalonicense. Empezó a jugar en el Kalamariá y de ahí pasó al Aris (2007-2008), al que regresó más adelante para quedarse 2 temporadas (2010-2012). Entre 2012 y 2014 jugó en el PAOK a un buen nivel, lo que le sirvió para fichar por el Canarias.

En la foto de la Selección Junior de 2002 están Zisis, Haritopoulos y Tapoutos.

El pívot Dimitris Haritópoulos jugó en el Aris cuatro temporadas en sus inicios como profesional (2002-2006). Fichó por el eterno rival (2006-2008), al que regresó en dos ocasiones más (2012-2013 y 2014). Actualmente sigue en activo en el PAOK, al que volvió tras su periplo por España.

Extranjeros que han vestido más de una camiseta.

A la lista de los Missounov, Berry, Tarpley, Jones y Papachronis habría que añadir otros que quizás hayan dejado menos huella que los anteriores.

No es el caso de Frankie King, que sí dio muestras sobradas de su talento tanto en el PAOK (temporada 1998-1999) como en el Aris (temporada 2001-2002).

Anteriormente, Charles Shackleford había estado haciendo de las suyas también en ambos equipos. El pívot “zurdo, diestro, ambidiestro, amfibio”, como se definió él mismo, un chico malo de los de antes, ganó la Copa Korac con el Aris (temporada 1996-1997) y luego jugó un año en el PAOK (temporada 1997-1998).

Torrey Braggs hizo poca cosa en el Aris (temporada 2001-2002) y menos en el PAOK (2003-2003), que lo cortó irremediablemente.

El pívot croata de 2,10 Ivan Grgat también pasó por los dos equipos grandes de Salónica sin pena ni gloria (Aris 2002-2003 y PAOK 2004-2005).

Poco después del Draft de 2006, el base Darius Washington firmó por el PAOK, aunque no terminó la temporada en Salónica (se fue al Nymburg). En la temporada 2007-2008 regresó a la ciudad para vestir de amarillo. Firmó 2 años por el Aris, pero con uno sobró y lo dejaron marchar.

El montenegrino Blagota Sekulic llegó a Grecia en 2003 para fichar por el AEK. De ahí pasó al Marousi y después, en 2006, al PAOK de Salónica. Su buena temporada le valió para fichar por el Real Madrid. Un año después regresó a la ciudad para firmar por el Aris, donde realizó un buen año. Se marchó al Alba Berlín en 2009.

Selección Nacional de Salónica.

Para terminar, recopilo en una plantilla a jugadores nacidos en Salónica, hayan o no hayan hecho carrera en la ciudad. Sobre los no citados anteriormente, haré un pequeño comentario.

Bases: Vangelis Alexandris (también coach), Nikos Chatzivrettas, Lefteris Kakiousis (también coach), Dimitris Verginis, Kostas Sloukas y Lefteris Bochoridis.

Escoltas: Savvas Iliadis y Nikos Zisis.

Aleros: Kostas Charalampidis, Panagiotis Vasilopoulos, Kostas Vasileiadis, Dimitris Papadopoulos y Michalis Romanidis.

Pívots: Michalis Tsairelis, Christos Tapoutos, Panagiotis Fasoulas y Vasilis Lipiridis.

Entrenadores: Soulis Markopoulos y Giannis Ioannidis (y jugador).

Con 20 años, Bochoridis es la última gran promesa nacida en Salónica. Tras explotar en el Aris, fichó hace un par de temporadas por el PAO, donde su progresión se ha visto ligeramente estancada por falta de minutos.

Nikos Zisis jugó en el Xanth de Salónica antes de marcharse al AEK, donde ganó la liga y empezó su meteórica carrera. Ligas en varios países y títulos con la Selección adornan su extraordinario currículum. ¿El mejor jugador tesalonicense de la historia?

Panagiotis Vasilopoulos era un fenómeno en el PAOK y estaba llamado a dominar la liga. Un superclase muy fuerte que acabó con problemas de lesiones. Pese a ello, fue internacional y ganó varios títulos con el Olympiacós y con la Selección.  

Kostas Vasileiadis es ADN PAOK. Se marchó del club demasiado pronto debido a los problemas económicos que atravesaba el mismo. Ha hecho carrera sobretodo en España.

Dimitris Papadopoulos fue un jugador del Iraklís de la década de los 80-90. El Doctor llegó a internacional e hizo grande al equipo azul.

Michalis Romanidis sería el equivalente de citado Dimitris Papadopoulos, pero en el Aris. El sexto hombre, titular a veces, de la época de Galis. Fue internacional. Alero fuerte.

De Panagiotis Fasoulas poco podemos decir que no se sepa. Considerado un traidor por los aficionados del PAOK que tanto lo amaron, no se atreve a pisar suelo tesalonicense a pesar de haber nacido ahí. Para muchos, el mejor pívot de la historia del baloncesto griego.

La carrera de Lipiridis siempre irá unida al Aris. Pívot resultón de la época de Galis que pasó muchos años en el club y que sigue vinculado al mismo todavía hoy desde puestos directivos.

Otro jugador es Kostas Sloukas, gran base zurdo que ha hecho carrera en el Olympiacós y que ha fichado recientemente por el Fener turco. Kostas nació en Thermi, que pertenece al término municipal de Salónica.

Seguro que me dejo a muchos, aunque estos son los pricipales. Efthimis Tsakaleris, un ala-pívot delgado todavía en activo podría ser un ejemplo. Giorgos Apostolidis, alero ex del PAOK de la época de Vasileiadis, otro.

sábado, 18 de octubre de 2014

La Segunda Dinastía Roja II (Olympiacós 1991-1997).



Temporada 1993-1994: un doblete amargo. La marcha de Zarko Paspalj.

Roy Tarpley a su llegada al aeropuerto.

El Olympiacós fichó a Roy Tarpley para afrontar el asalto a la Euroliga. El americano, que todavía no podía volver a la NBA, había hecho un temporadón en el Aris, con el que había ganado la Recopa de Europa. Para cubrirse las espaldas con el polémico jugador, el club llenó el contrato de cláusulas. Sus excesos eran vox populi. Quizás no haría olvidar a The Truth, jugador mucho más espectacular y ofensivo, pero su presencia bajo los aros debía notarse.

Efthimis Bakatsiás.

Efthimis Bakatsiás fichó procedente del Pagrati, al que se fue Elliniadis. Internacional en todas las categorías, Efthimis era alto, buen defensor y más rápido que Tomic. Sin duda, Bakatsiás era el base griego con más proyección de entonces y no tardaría en ser convocado con la selección absoluta.

Panagiotis Fasoulas firmando por los rojiblancos.

Junto a él y a Tarpley, el fichaje estrella de la temporada fue Panagiotis Fasoulas, que llegó envuelto en polémica. Los aficionados del PAOK lo acusaron de traidor y de tener apalabrado el fichaje desde la temporada anterior. La Araña era el pívot titular de la selección y una garantía debajo de los aros, sobretodo en defensa. Con Roy, Panagiotis, Tarlac y Papadakos, el Olympiacós tenía el mejor juego interior de Europa. Ioannidis no sólo fichaba jugadores importantes para el equipo sino que además debilitaba a rivales directos (el Aris sin Tarpley y el PAOK sin Fasoulas).
Poco antes de empezar la temporada, en un amistoso en el Pireo contra el Minsk, Dragan Tarlac se rompió el cruzado. Estaría 6 meses de baja. Un bajonazo. Aunque se recuperó para el momento importante de la temporada, no pudo ayudar mucho al equipo.
_____

La gente acudió en masa al debut en liga frente al Mylonas, equipo recién ascendido (casi 9000 personas). La plantilla, a pesar de la baja del serbio, era la más completa de Grecia y de las mejores de Europa, con Tomic, Bakatsiás, Karatziás, Limniatis, Sigalas, Stamatis, Nakic, Paspalj, Papadakis, Tarpley, Kambouris, Papadakos, Tarlac y Fasoulas.  

En la fase de grupos de la Euroliga, el Olympiacós empezó como un tiro. Ganó en Madrid y en Treviso, y se puso primero con 5 victorias y 0 derrotas. La primera derrota fue en Barcelona, y luego cayó en el Pireo contra el Limoges. Los tropiezos no evitaron que los de Ioannidis acabasen primeros de grupo. El rival en el cruce sería la Kinder de Bologna. 

En Italia, los locales vencieron por 77-64. Los griegos empataron en el Pireo tras una holgada victoria (89-69), pero sufrieron de lo lindo en el tercero y definitivo (65-62). Un tapón de Fasoulas a Moretti a escasos segundos para acabar hizo estallar el SEF. El Olympiacós se clasificaba por primera vez para la Final Four, y era el claro favorito.

Más preocupado por Europa, se dejó ir en partidos alejados del Pireo. Sufrió dolorosas derrotas contra el Panionios, el PAOK y el Panathinaikós. Sin embargo, logró recuperar los averages. Una semana antes de la Final Four que le enfrentaría a los verdes de Galis, el Olympiacós ganó al PAO en el último partido de la fase regular.

Paspalj y Ferran Martínez en Tel Aviv.

En el partido contra el PAO, un parcial de 15-0 en la segunda parte acompañado del gran marcaje de Sigalas sobre Galis (sólo 8 puntos), llevaron al equipo colchonero a la final. Ya le dediqué un post a la final de la Final Four de Tel Aviv, que podéis leer pinchando aquí.
____

En la Copa, el Olympiacós eliminó al Peristeri (90-71), al Aris en Salónica (56-68) y al Panionios en Nea Smirni (76-88). El rival en la final fue el Iraklís de Salónica de Jure Zdovc y James Donaldson. Los de Ioannidis no se dejaron sorprender y superaron con claridad a los azules (63-51), logrando así el primer título de la temporada.

____

En los play off de la liga, no tuvo problemas hasta la final. Eliminó por la vía rápida el AEK (2-0) y al Panionios (3-0), mientras por el otro lado del cuadro los bicéfalos se deshacían del PAO

Contra el PAOK de la pareja Prelevic-Berry, que acababa de ganar la Copa Korac, el Olympiacós hizo valer el factor cancha. Ganó el primer encuentro con claridad (81-66), perdió el segundo (81-68), se impuso en el tercero (80-73), cayó en el cuarto (68-62) y sentenció en el quinto (70-65).
El último partido fue muy polémico y el PAOK estuvo a punto de retirarse a falta de escasos segundos para el final. Fue obligado a salir de los vestuarios y a regresar a la pista, donde apareció un quinteto con los calcetines bajados y las botas descordadas. 

Era la segunda liga consecutiva de la Dinastía, y el primer doblete, que pudo ser triplete de no ser por el Joventut. Estaba claro que la línea seguida era la correcta, a pesar de los métodos casi paramilitares del Rubio y de su carácter conflictivo.

Tarpley vs Savic.

Sorprendentemente, Zarko Paspalj, el jugador franquicia de la Segunda Dinastía Roja, abandonó la entidad al terminar la temporada. Tampoco Roy Tarpley siguió de rojiblanco, con lo que dos de las piezas claves de la temporada pagaban la derrota de Tel Aviv.

Volkov y Paspalj ficharían por el eterno rival la temporada siguiente.


Temporada 1994-1995: la maldición de Ioannidis en Europa continúa.

Tarpley quería volver a la NBA, o en caso de no poder hacerlo, cobrar más en el Olympiacós. Su comportamiento durante la Final Four, dentro y fuera de la pista, había sido de todo menos ejemplar, y el club no le quiso mejorar el contrato. Regresó a Dallas y todos contentos. Allí Roy volvería a las andadas.


La noticia bomba de aquel verano fue el fichaje de Zarko Paspalj por el Panathinaikós. Al montenegrino no le renovaron el contrato y acabó en el eterno rival. Por contra, Kókkalis se la devolvió a los verdes llevándose a Alexander Volkov, que en principio parecía que regresaba a la NBA. Además, firmó a Eddie Johnson, veterano alero que llegó para hacer olvidar a Zarko. Es decir, de la temporada anterior sólo fueron cambiados los dos jugadores extranjeros. 

Eddie Johnson y Sokratis Kókkalis.

Con Eddie Johnson, Kókkalis acertó plenamente. A pesar de sus 35 años, el americano parecía ser la pieza del puzzle que faltaba. El equipo necesitaba tiro exterior y con Eddie la efectividad estaba asegurada. Demostró una gran profesionalidad y aportó muchas más cosas, no sólo lanzamiento.

Alexandr Volkov.

Volkov llegó del PAO vía New Jersey Nets y era conocido por todos. Calidad en la zona y pelea a pesar de sus problemas físicos. Faltaba un pívot poderoso como Tarpley, pero con Volkov, Fasoulas, Tarlac -plenamente recuperado-, Papadakos y Kambouris, el juego interior era bastante nutrido.
____


En la Copa de Grecia llegó el jarro de agua fría de la temporada. En un insoportable partido, el Olympiacós perdió en el pabellón del Sporting –se jugó allí por la sanción que arrastraban los pireotas por los incidentes de la final liguera del año anterior- por 40-42 contra el Panathinaikós y quedó eliminado en la primera ronda. El peor debut posible de Eddie Johnson, que ni había hecho pretemporada con el equipo ni había jugado amistosos. La alegría de los verdes duraría poco, puesto que caería en la ronda siguiente contra el Peristeri (70-74).
____

El debut en liga, tras aquel golpe, se preveía complicado. Jugar en el Alexandrio contra el Aris no era tarea fácil, pero los rojos acabaron imponiéndose por poco. A Johnson le cayó un objeto en el pómulo, que si llega a ir un poco más arriba lo deja sin ojo.

A partir de ahí, el Olympiacós enlazó 4 victorias seguidas en Europa y 8 en liga, conquistando las pistas del Aris, del PAOK y del PAO, nada menos. Tenía que ser el Limoges de Maljkovic, la bestia negra rojiblanca, el que rompiera la racha. 

A continuación, el Olympiacós perdió en Bologna, ganó al Barça y fue humillado en el SEF por el Efes Pilsen, que dio la sorpresa ganando de 23 (en Estambul los griegos lo habían hecho por 35). Dragan Tarlac (23 puntos) impuso su ley bajo los aros en Zagreb y los griegos sumaron otro triunfo por 60-69 ante la Cibona, dejando casi decidida la clasificación, con ventaja de campo en el cruce. Sin embargo, otra vez Boza se cruzó en el camino, esta vez en el Palacio de la Paz, que obligó a los de Ioannidis a lograr una sufrida victoria en Bologna. El equipo se repuso a una inoportuna lesión de Sigalas y acabó segundo de grupo.
____

En Grecia es el Iraklís el equipo que suele atragantársele a Ioannidis. Los azules de Walter Berry ganan en un gran partido, y el Olympiacós-Panathinaikós decidirá muchas cosas. El derby, esta vez sí, lo tiene todo. Por el PAO ya no están ni Galis ni Politis, pero los verdes dan la campanada (72-74) merced a una canasta de Zarko Paspalj -no podía ser otro- con la derecha. Un error en el tiro libre deja el basket average particular empatado. El Olympiacós suma una derrota más, pero en el average general va por delante. El Iraklís se cruza en el camino, esta vez del Panathinaikós, al que derrota en Salónica a falta de tres jornadas para el final, dejándole en bandeja de plata la primera plaza a los rojiblancos.
____


Sobre el enfrentamiento contra el CSKA en los octavos de final de la Euroliga, os remito a este post. Nadie vio nada, nadie investigó, nadie dijo. El Olympiacós se metía en la Final Four por segundo año consecutivo.

Patavoukas no pudo con Johnson.

En Zaragoza, el equipo del Pireo volvió a ganar al Panathinaikós (58-52), que llegaba convencido y en buena forma. Pero el Olympiacós gozaba de la experiencia suficiente. Eddie Johnson hizo uno de los mejores partidos que se le recuerdan, tanto en ataque como en defensa. Anotó 27 puntos con 4 triples y cogió 10 rebotes. El choque se mantuvo igualado, con ventajas mínimas para los verdes, pero en el momento de la verdad, los rojillos demostraron estar más preparados. Un triple de Tomic sentenciaba el pase a la final. De nada sirvieron los 17 puntos de Paspalj y los 12 con 17 rebotes de un gran Stojko Vrankovic.


Contra el Real Madrid no hubo opción (73-61) a pesar de que la presión era menor que el año anterior. El Madrid era el favorito y se cumplieron los pronósticos. Sabonis (23) y Arlauckas (16) dominaron bajo los aros, y los blancos siempre llevaron la iniciativa. Volkov, mermado, hizo lo que pudo y metió 15 puntos. A los aficionados griegos, sin duda, les dolió mucho más la derrota de Tel Aviv que la de Zaragoza.
____

El Olympiacós se desquitó en la liga, derrotando sin problemas al AEK (2-0) y dejándose un partido en el Ivanofeio, para variar (2-1). Debió ser curiosa la serie, porque en el SEF destrozó al Iraklís en el primer choque por 84-46 y en el tercero por 81-47. Sin embargo, en Salónica los azules ganaron por 89-77.
Los problemas de cintura de Sasha Volkov lo dejaron fuera de la final. Además, sus relaciones con Ioannidis eran pésimas.


La serie contra el PAO fue de las más reñidas que se recuerdan. Decidió el factor cancha, puesto que ninguna de las escuadras logró hacer el break. El Olympiacós ganó el primero (82-66), el tercero (66-56) y el quinto (45-44) y el PAO el segundo (71-55) y el cuarto (65-57).

El resultado del quinto partido es bastante elocuente. Sokk estuvo 33 minutos en pista e hizo un espeluznante 1/10 en el tiro, Paspalj acabó con un terrorífico 5/29 (17%) si sumamos los tres partidos jugados en el SEF. En cambio Johnson enchufó 34, 30 y 16. Los de Ioannidis se cerraron bajo el aro, concediendo tiros lejanos a los verdes que no aprovecharon. Fasoulas y Tarlac hicieron un buen trabajo, y no se notó la baja de Volkov

A los Giannakopoulos se les acababa la paciencia. Necesitaban dar un golpe de efecto para destronar a los pireotas. 

La temporada había empezado con un lamentable 40-42 y había terminado con un deplorable 45-44.

Temporada 1995-1996: paso atrás en Europa. El 73-38 que evitó el triplete verde y el polémico adiós de Ioannidis.

Dos hechos marcan el verano baloncestístico de 1995: Grecia gana el Mundobasket junior metiendo a 20.000 almas en el Palacio de la Paz y el Panathinaikós ficha a Dominique Wilkins y Bozidar Maljkovic. Boza, la auténtica bestia negra del Olympiacós, había derrotado a los marineros seis veces en tres años.

David Rivers.

Kókkalis tarda en reaccionar. Se barajan algunos nombres potentes (Scott Skiles, Terry Porter…), pero no llegan. Al final es David Rivers el elegido, ex de los Lakers y MVP de la liga francesa. Jugador muy rápido, buen pasador, gran suspensión y experto en robar bolas, pero no era Eddie Johnson, que había calado muy hondo entre los aficionados.  Además, al lado del fichaje de Wilkins, quedó totalmente eclipsado.

Al margen de los americanos, la principal novedad en el roster es que Franko Nakic pasa a ocupar puesto de titular. Llega el internacional Nasos Galakteros, alero alto procedente del PAOK, y Dimitris Papanikolaou, uno de los juniors de oro de ese verano, procedente del Sporting.

El regreso de Walter Berry.

El segundo extranjero en llegar, sustituto de Sasha Volkov, fue Walter Berry, que venía de hacer una magnífica temporada en el Iraklís. Sin embargo, las cosas no fueron bien desde el principio. Berry sabía de las duras pretemporadas e hizo todo lo posible para retrasar su llegada. ¡Ioannidis lo quería echar en agosto! Sin embargo, pudo más la presión de la gente que la opinión del coach.

Anatoly Zourpenko.

Argyris Kambouris dejó el equipo, acabando su carrera en el Peristeri, aunque fue el Olympiacós el que pagó su ficha aquel año. En su lugar subió al primer equipo Anatoly Zourpenko, uno de los caprichos de Ioannidis

Además de todos estos movimientos veraniegos, Dragan Tarlac fue elegido en el Draft.
____

La temporada comenzó con un tropiezo inesperado en casa contra el PAOK (76-77). Al siguiente partido, se lesionó Galakterós. La segunda derrota no tardó en llegar (66-61 contra el PAO), como tampoco la segunda lesión (Tarlac, por un mes). 

En Salónica, el Olympiacós venció al Aris con un Walter Berry “griposo”, pero los análisis confirmaron que la supuesta gripe era en realidad Hepatitis B. Al margen de la gravedad de la enfermedad, Ioannidis ya no podía sustituir al americano en Europa. Sonó Tarpley de nuevo para sustituirlo en la liga, pero al final nada.

Papadakos y Papanikolaou adquirieron un protagonismo inesperado en la Euroliga debido a las bajas.


En el campeonato de liga, el equipo se recuperó, no así en Europa. Cayó en Treviso, contra el CSKA en el SEF, etc… Berry volvió a las canchas relativamente pronto, un mes y medio después, en la victoria contra el Málaga en España, aunque se le vio claramente fuera de ritmo.

Ganando al Panionios y al Panathinaikós, el Olympiacós se garantizó la primera plaza con 24 victorias y 2 derrotas. A pesar de los constantes problemas en forma de lesiones y enfermedad, fue la mejor fase regular de la Dinastía. La segunda unidad y los hombres menos protagonistas demostraron su calidad.

En cuartos de la Copa, el Panathinaikós eliminó al Olympiacós, derrotándolo con claridad por 85-72. Los de Boza acabarían ganando el título. 

En Europa, tenía casi asegurada la segunda plaza tras cinco victorias consecutivas. Sin embargo, una inesperada derrota del CSKA en Antibes lo cambia todo. Hay quien dice que los rusos se dejaron perder como venganza por el suceso del envenenamiento del año anterior. Se produjo un triple empate en cabeza (CSKA-Olympiacós-Benetton) que condenó a los griegos a la tercera plaza. Esperaba el actual campeón, nada menos.

55

Aunque los rojiblancos se impusieron en el SEF por paliza (68-49), el Real Madrid aprovechó el factor cancha, ganando los dos partidos siguientes (80-77 y 80-65). Después del segundo partido, se produjo una conversación subida de tono entre Kókkalis y Ioannidis en los vestuarios. Presidente y entrenador no volverían a hablarse en toda la temporada. El equipo debía reponerse al golpe de no haber llegado a la Final Four y de ver como el Panathinaikós levantaba el trofeo en París. Los verdes amenazaban con el triplete y el clima en El Pireo no era el mejor. El Rubio, pasase lo que pasase, parecía sentenciado.

La serie prometía emoción e igualdad. En el SEF, los locales se adelantaron (67-63), pero el PAO empató en el OAKA (65-63).

Wilkins estaba tocado del tendón de Aquiles y Maljkovic decidió no forzarlo en el tercero a pesar de la importancia del duelo. Dominique jugó sólo 8 minutos en la derrota verde por 72-65. Se dispararon los rumores. Podría forzar, pero ya tenía contrato firmado para el año siguiente en la NBA. Nadie sabe hasta qué punto es cierto, pero la realidad es que el americano se largó. Ya no se sentó en el banquillo en el cuarto partido. Además, su manager presentó una hoja de gastos que se le adeudaban y la reclamaba al club. A pesar de este clima enrarecido, el PAO logró empatar de nuevo la serie y se impuso en el OAKA por 79-74.

Si el quinto partido de la serie del año anterior había pasado a la historia por el tanteo y la igualdad (45-44), el de la temporada 95/96 todavía escuece hoy a los verdes.


El choque entrará en los anales de la historia. El Olympiacós humilla a los de Bozidar Maljkovic (73-38) y se proclama campeón de liga por cuarta vez consecutiva. 35 puntos de diferencia contra el campeón de Europa. Desde luego, si los árbitros no hubieran regalado el triunfo a los del trébol en París, la temporada habría acabado en fracaso.


A pesar de la victoria, las diferencias entre Ioannidis y Kókkalis son demasiadas y el Rubio abandona. El presidente opta por Dusan Ivkovic para sustituirle.